11 de julio de 2010

Conflictos armados y su relación con la pobreza: Análisis de los elementos constitutivos del conflicto.


En el ámbito de las relaciones internacionales es especial en materia de conflictos armados, previo a cualquier tipo de intervención o pronunciamiento por parte de algún actor internacional es necesario entrar a la calificación del conflicto. Para esto es indispensable un análisis previo de los factores que influyen en estos procesos; estos pueden ser de carácter estructural, o político o culturales, pero indiscutiblemente socio económicos. Como bien lo manifiesta, Paul Collier en su libro “the bottom billion”, los conflictos armados están intrínsecamente ligados a las condiciones de vida de las sociedades donde estos acaecen. Es decir, mientras más pobre es una sociedad, más vulnerables son sus individuos, por lo tanto más próximos a sumirse en un circulo vicioso de violencia, que irremediablemente desencadenará en un conflicto armado. Este círculo en el que las sociedades caen, constituye una trampa de la cual es muy improbable que se pueda salir debido a que aquí se conjugan pobreza, desesperación, impotencia, baja autoestima, falta de oportunidades, lo que finalmente desencadena violencia.
Cuando se habla de conflicto interno es posible que surja la confusión entre las situaciones de violencia interna leve, o las crisis esporádicas tan propias de los países en vías de desarrollo, e inclusive, mal entender el término y asimilarlo como disturbios, revueltas u otros actos similares que definitivamente traen caos y preocupación a los gobiernos donde ocurren, pero que no constituyen una situación de violencia interna mayor o un conflicto armado interno análogo a una guerra civil.[1]
Las situaciones de violencia interna mayor traen consigo disputas violentas entre elementos de un Estado, sean estos ejércitos liderados por el estado, o, como en el caso de Sudán y Colombia, milicias armadas organizadas, unas con el respaldo del gobierno o grandes grupos económicos (paramilitares), y  grupos armados subversivos, e inclusive disputas entre estos últimos. Estas situaciones se llevan a cabo dentro de los límites territoriales de un Estado y pueden ser originadas por varios factores, como luchas tribales, peleas por recursos naturales, campañas secesionistas en contra de la cohesión de un país, revoluciones, todas estas enmarcadas dentro de un contexto de pobreza extrema, de subdesarrollo y de escasez de posibilidades de crecimiento personal y económico; todas estas atentan contra la estabilidad de la gobernanza de un Estado y su monopolio del poder bélico.[2] Las guerras civiles generalmente son la última etapa del circulo vicioso de los conflictos en el que la escala de violencia es paulatina y producto de la desintegración social y políticas públicas no incluyentes a toda una nación.[3]
Una vez definida la extensión de este término es necesario adentrarse y comprender cuales son las causas que llevan a que esta situación se produzca dentro de un estado. Muchos políticos argumentan que las causas de los conflictos internos son simples y aseguran que los odios ancestrales que los diferentes grupos religiosos o étnicos tienen entre ellos es el principal fundamento para que estos ocurran.[4]Este es el caso del ex presidente estadounidense George Bush al manifestar que el conflicto entre musulmanes, serbios y croatas fue generado por rencores ancestrales.[5]  Y quizá si se mira de reojo y sin poner mucha atención este sea el caso de algunos, donde ciertamente sus conflictos tienen también una raíz étnica ancestral. No obstante en la mayoría de las situaciones de violencia que existen en el mundo en este momento, las causas son más profundas, pese a que existe una que es similar en todos los casos, esta es la pobreza.
Para poder identificar la raíz de estos conflictos de una manera elocuente es necesario el análisis de los factores correspondientes al desarrollo de la sociedad, la estabilidad política y la relación del gobierno de un estado con sus nacionales, para este trabajo se ha decidido aplicar la teoría de Michael E. Brown sobre las causas de los conflictos internos la cual divide en cuatro los factores fundamentales para el estallido de la violencia en un país o región, factor estructural, político, económico social, y cultural.[6]
1.1 Factor estructural
El primer factor es el estructural el cual se refiere al diseño del estado, per se, es decir la existencia de estados artificialmente creados y con una geografía étnica muy diversa. Estos estados carecen de legitimidad política ante los ojos de sus ciudadanos y usualmente sus instituciones son tan débiles que no poseen ningún tipo de control sobre el territorio del país. La única razón por la cual el gobierno se mantiene en el poder es debido a los fuertes ingresos económicos que producen tanto los recursos naturales como la ayuda externa al desarrollo.[7] No obstante, el momento en que la estructura se debilita la violencia surge y el liderazgo o el control del país se ve amenazado por una lucha por el poder entre grupos armados organizados y las fuerzas del Estado, sin embargo estas carecen de legitimidad puesto que son los mismos ciudadanos los que reclaman el poder para otro grupo.
Además en el caso de estados con una variedad étnica importante, el grupo que ha sido tradicionalmente aislado y sometido por parte del gobierno de turno, o la dictadura de turno, como son los casos de el Kurdistán o Sudán respectivamente, se levanta y reclama mayores derechos políticos y una libertad administrativa sobre su propia región. No obstante el estado haciendo uso de la fuerza generalmente intenta someter, a los rebeldes, para prevalecer en el poder usualmente ocasionando crisis humanitarias de gran envergadura que lastimosamente se quedan en la memoria de las futuras generaciones de esos pueblos. Esta última casualidad tiene un peso más grande de lo imaginable puesto que estos recuerdos tan dramáticas impiden a los estados en el futuro salir de las trampas de los conflictos,[8] en otras palabras simplemente alientan la continuidad de la violencia estancándose en un circulo vicioso que significará que pese a que un estado alcance la paz, la probabilidad de que este vuelva a tener una crisis es inminente.[9]
1.2 Factor político
Otro de los factores que M.E Brown reconoce, es el político, el cual, según manifiesta este autor, está compuesto por instituciones políticas discriminatorias, donde existe una clara ideología nacionalista que es excluyente con la diversidad de sus ciudadanos[10] y también donde ciertos grupos de élites políticas han concentrado el poder en su esfera más cercana.[11] Así,  el control por parte de un gobierno autoritario liderado por una ideología nacionalista o de tintes radicales, puede entrar en un proceso de construcción de instituciones políticas que discriminan y que no representan de ninguna forma a todos los sectores del país. Esto puede afectar en varias esferas a nivel nacional puesto que las políticas públicas discriminatorias irán en detrimento de las poblaciones más vulneradas de esta forma impidiéndoles el acceso a los servicios públicos, como son la educación, la salud, la seguridad social, e inclusive poniéndoles como centro de los ataques para reivindicar una posición que usualmente no es la de la de la mayoría, 
1.3 Factor económico social
El tercer factor es el económico social, el cual desencadena conflictos armados internos debido a problemas económicos, por ejemplo, una política discriminatoria en materia de economía conlleva ciertamente a un aislamiento de ciertas partes de un estado y las somete al subdesarrollo e inclusive a la pobreza extrema. Además, los sistemas económicos que discriminan en base a la etnia o la clase social que pertenecen generan e inclusive promueven sentimientos de desigualdad, rechazo e inclusive complejos de inferioridad, que desencadenan inevitablemente en violencia. El desarrollo económico, como bien lo manifiesta Paul Collier, no siempre es la alternativa puesto que este puede inclusive aumentar la brecha entre los ricos y los pobres[12] e inclusive dividir a las regiones entre marginalizadas y modernas[13] como ha sucedido en muchos de los países del Sur. Así es el caso del Salvador en que un porcentaje privilegiado de la población del país, ubicado en los centros de poder económico, ha marginalizado a la gran mayoría de la población y los a sumido en la pobreza y pobreza extrema. Esto se produce debido a una política económica no incluyente que privilegia a los mismos grupos y que no propende a una correcta redistribución de la riqueza, desencadenando una ola de violencia con un rostro claro de pobreza y exclusión.
1.4 Factor cultural
El cuarto factor que se analiza es el cultural, en el cual se interrelaciona los factores analizados previamente y se hace mención una vez más a la premisa de la discriminación a minorías como causa de conflicto. Junto con esta se identifica también la percepción que un grupo puede tener de sí mismo. En el caso de Sudan los sentimientos de superioridad por parte de los grupos árabes sobre los africanos usualmente reviven los odios ancestrales e inclusive los hacen legítimos. Esta percepción de una raza o etnia como inferior ha afectado a la humanidad durante toda su existencia, basta con recordar dos ejemplo palpables en la historia de la humanidad, como son el caso del genocidio Judío y el genocidio en Ruanda, que han dejado una lacra imborrable en la historia. Es decir el factor cultural es determinante a la hora del desencadenamiento de un conflicto y como se ha mencionado anteriormente ha ocurrido a lo largo de Sudán, especialmente en la región occidental, Darfur.
Como queda claramente expuesto la vinculación entre conflicto desarrollo y pobreza es evidente los centros de poder usualmente excluyen a ciertos grupos, sea por su raza, por su condición social o varios otros factores, sometiéndolos a la pobreza y al subdesarrollo.

Bibliografía
1.     ECKSTEIN, HARRY., Introduction: Toward the theoretical Study of Internal War, (Harry Eckstein eds.), Internal War: Problems and Approaches, New York: Free Press, 1964. P. 17. 
2.     BROWN, MICHAEL E. op. cit. P.16.
3.     COLLIER, PAUL.,  The bottom billion, Oxford University Press, 2008. P.100.
4.     COLLIER, PAUL., Breaking the conflict trap: Civil war and development policy, World Bank Publications, 2003. P. 74.
5.     GURR, TED ROBERT,  AND HARF, BARBARA.,  Ethnic Conflict and World Politics, Boulder, Colo.: Westview, 1994. P. 42.
6.     MA AGUIRRE, AA PIRIS, TED ROBERTANUARIO CIP 1995-1996: RAICES DE LOS CONFLICTOS ARMADOS, 1996. P. 27.
7.     MARTÍN,M., Conflictos armados internos y derecho humanitario, Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca 1990. P. 23 También ver: ECKSTEIN, HARRY., op. cit. P. 18.
8.     PODESTA COSTA,L.A., Ensayo sobre las luchas civiles y el Derecho Internacional, Buenos Aires 1926. P. 13.  Además ver: BROWN, MICHAEL E., The International Dimenssions of Internal Conflict, CSIA Studies in International Security, 1996 P. 1.
9.     RULE, J.,  Theories of Civil Violence, University of California Press, 1989. P.33.


[1] ECKSTEIN, HARRY., Introduction: Toward the theoretical Study of Internal War, (Harry Eckstein eds.), Internal War: Problems and Approaches, New York: Free Press, 1964. P. 17. 
[2] MARTÍN,M., Conflictos armados internos y derecho humanitario, Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca 1990. P. 23 También ver: ECKSTEIN, HARRY., op. cit. P. 18.
[3] PODESTA COSTA,L.A., Ensayo sobre las luchas civiles y el Derecho Internacional, Buenos Aires 1926. P. 13.  Además ver: BROWN, MICHAEL E., The International Dimenssions of Internal Conflict, CSIA Studies in International Security, 1996 P. 1.
[4] , MA AGUIRRE, AA PIRIS, TED ROBERTANUARIO CIP 1995-1996: RAICES DE LOS CONFLICTOS ARMADOS, 1996. P. 27.
[5]  Haciendo referencia a George Bush. BROWN, MICHAEL E. op. cit. P.12
[6] Íbidem.
[7] COLLIER, PAUL.,  The bottom billion, Oxford University Press, 2008. P.100.
[8] COLLIER, PAUL., Breaking the conflict trap: Civil war and development policy, World Bank Publications, 2003. P. 74.

[9] COLLIER, PAUL., op. cit. P. 18.
[10] GURR, TED ROBERT,  AND HARF, BARBARA.,  Ethnic Conflict and World Politics, Boulder, Colo.: Westview, 1994. P. 42.
[11] BROWN, MICHAEL E. op. cit. P.16.
[12] COLLIER, PAUL., op cit. P. 67.
[13] RULE, J.,  Theories of Civil Violence, University of California Press, 1989. P.33.